EMBOTELLANDO EN LA CHAMBA

Es tiempo de asar pimientos para embotellar, me encanta el olor a pimientos asados que hay en el pueblo. Echar unas horas preparándolo todo merece la pena porque el resultado es rico rico. Es un placer hacer tus propias conservas con pimientos y tomates del terreno, está garantizada la calidad del producto y por encima de todo el placer de hacer tus propias conservas no tiene precio.
Elaboración:
Se asan los pimientos, se pelan y limpian bien de pepitas y se cortan a tiras.
Se pelan los tomates, se estrujan bien para quitarles el líquido, se parten a trocitos y se dejan escurrir (yo hago todo esto con las manos).
Se mezclan los pimientos y tomates en un recipiente y se van llenando los botes (bien lavados y escurridos previamente).
Se introducen los botes bien tapados en una olla y se cubren con agua fría, se ponen a calentar y se mantienen media hora aprox a partir de que empiece el agua a hervir.
Se sacan de la olla cuando el agua se haya enfriado y ¡listo! ya tenemos conservas para todo el año.
Hay muchas maneras de consumirlo, en ensalada, como pisto, como sofrito de potajes, etc